Las fuentes de Terrassa y rodalías.

Como ya he comentado en otras ocasiones, normalmente mi señora y yo, vamos periódicamente a buscar agua a la fuente. Hace muchos años que lo hacemos, y no solo traemos agua para nosotros sino también para nuestros dos hijos. Empezamos por ir a la fuente del Albar, cuando se secaba, íbamos a la de Can Guitart, a la del Llimac, a la del Sr. Ramón, a la del Carlet, etc. Pero la fuente del Albar, desde luego esta acabada, prácticamente no mana en todo el año, supongo que alguien sabrá por que, la del Guitart, pusieron cadenas y no dejan pasar, la del Carlet no arreglan el camino, y cada día esta peor. También habíamos ido a Vacarisas, a la fuente de la Urpina, en fin ahora vamos a la del las arenas en Castellar del Valles y como, si no viene una sequía muy fuerte, allí no falta nunca el agua, ahora en verano nos levantamos temprano, y no vamos para allí.

Hoy desde luego estaba precioso todo aquello, el rió bajaba con un agua clara, a pesar de lo que ha llovido esta noche, un caudal bonito, para como baja el rió Ripoll normalmente. El bosque estaba precioso, había varias personas buscando caracoles, en los alrededores de la fuente habían segado las malas hierbas, aunque no las quitan, normalmente las extienden por tierra, y eso después sirve de encendedor, para los incendios. Aunque ahora no creo que haya incendios allí, por que esta, que brota agua por todas la partes.

Pues lo bueno de este tiempo, es lo fresco que se esta a esa temprana hora, y hoy con la lluvia de esta noche estaba toda la vegetación, limpia sin polvo, el aire puro, el ambiente ideal. Y entonces se pone a pensar uno en los trasnochadores, y piensa que eso no lo podrán disfrutar, por que el que trasnocha, no tiene ánimos para levantarse a esa hora y el se lo pierde, pues desde luego es la mejor hora del día y es una pena perdérsela por hacer el crápula.

En fin que cada uno tiene sus gustos, yo prefiero la mañana que la noche, la comida que la cena, ya se que voy contra la mayoría, pero desde aquel dicho: «Que más mató la cena que sanó Abicena», yo he suprimido las cenas y me limito ha hacer comidas, y como los ingleses, después de comer, el té de las 5 y aquí se acaban las ingestiones del día.

Cuando alguien me invita a cenar y le digo que yo no ceno, a veces se piensan que hago broma, pues no, no ceno lo siento, desde que no ceno me encuentro mejor, y el cuerpo me funciona mejor, y por lo tanto todo va mejor. El que quiera disfrutar de cenas por mi que lo haga, pero cenar para estar al día siguiente, todo el día como un Zombi, yo paso.