Las reparaciones en la casa donde se esta viviendo.

Trabaja uno toda la vida para comprar una casa, y cuando, por fin, la casa ya es de uno... no hay quien viva en ella. (Arthur Miller).
Todos tenemos nuestra casa, que es el hogar privado; y la ciudad, que es el hogar público.(Enrique Tierno Galbán).
Si tu mal tiene remedio ¿por qué te quejas?. Si no lo tiene ¿por qué te quejas?.(Proverbio oriental)

Estoy de reparaciones en la casa, es idea de mi esposa. Yo no me hubiera metido en obras, ni dándome dinero. ¿Y por que? Pues por que resulta, que la casa donde estoy viviendo, me la hice yo, desde sus cimientos. Yo cave los cimientos, las alcantarillas y además le hacia de peón al paleta que me venia los sábados y domingos a trabajar. Así fui haciéndola, hasta tener lo mas imprescindible para poder casarme y habitarla, no crean que con comodidades, si no lo justo para no mojarnos y poder vivir bajo techo. El resto hasta hoy, que tengo una casa bastante cómoda, no lujosa, ni mucho menos, lo fui haciendo según el dinero que recogía. Quiere decir, que si recogía cierta cantidad de dinero, me hacia la cocina, con otra cantidad ponía las puertas. En otro empujón me acababa el baño. Y así al cabo de un pico de años, me acabe la casa.

Cuando ya tuve la casa acabada y cómoda, como he dicho, resulta que los hijos ya empezaban a ser mayores y como no había hecho otra cosa que trabajar en toda mi vida, resulta que me embarque en hacerles la casa para ellos. Y así lo hice, resulta que como mas o menos todos los de mi generación, no quise que mis hijos tuvieran que pasar por donde yo había pasado, e intente solucionarles el problema. Craso error, ya que si ahora lo tuviera que volver hacer, estoy seguro que no lo haría. Y no es por nada, no. Total, de todo el esfuerzo y las privaciones que hemos pasado, tanto mi esposa como yo, para hacer lo que hemos hecho, solo hemos conseguido que nos dijeran nuestros hijos, que si les habíamos hecho la casa, era por que habíamos podido.

Pero vaya, que me voy por los cerros de Úbeda, que no era eso lo que les quería hablar hoy, aunque en parte por eso es, por lo que no quería hacer las obras, por que después de tantos años de penurias y con la mala salud que tengo, estoy harto de obras, de casa y de todo. En parte mi mujer tiene razón, resulta que la ducha la tenemos con la bañera. Y ella, que en casa de mis hijo le ha visto el plato de ducha, además de alguna que otra vecina, que le dicen que no hay nada como un plato de ducha, sobretodo para bañar a mi suegra que ya tiene 95 años, mas bien cerca de los 96 y no puede entrar en la bañera y así con plato de ducha, pues suponemos que no habrá problemas problemas. Pero claro el problema es que se tiene que sacar la bañera y colocar el plato de ducha. Y eso representa paletas, fontaneros, etc., en fin unos problemas que mi esposa se ha negado a ver. Yo he intentado explicarle, pero ella esta ciega con el plato de ducha y no hay quien le haga ver los problemas. Yo le dije que no estoy para obras, ya que siempre he sido yo, quien se ha cuidado de paletas y de todo el problema que esto trae consigo.

Así que cuando ya me estaba convenciendo, le dije que yo no me iba a cuidar de nada, que ella se tendría que entender con los paletas. Me dijo que si, pero vana esperanza, hoy han llegado los paletas a las 8 de la mañana y como hacen todos ellos, resulta que de los tres que venían, uno ha empezado a reventar todo el baño, mientras los otros se iban a por el material. El reventador se ha dado una prisa imponente. Pero los que han ido por el material, que pasaban las horas y que no venían, el pobre que estaba en trabajando en el baño, resulta que tenia de desayunar, pero como no venían los otros, pues que el tampoco se iba. Así que cerca de las 11, se presentan por fin y me dan la primera mala noticia de la obra.

Resulta que habían ido a buscar el plato de ducha, que es de Silex y que te lo hacen de encargo. Hemos tenido que esperar cuatro semanas a que lo trajeran. Y resulta que en el almacén, lo tenían en una estantería, y como es pesado lo tenían que bajar con el toro. Pues bien, al ir a bajarlo con el con el toro, se conoce que, el que manejaba la maquina, no lo ha centrado bien y se le ha caído al suelo y se ha partido en varios trozos. El paleta no sabía como decírmelo. Pero yo, que he hecho tantas obras en esta larga vida mía, ya se que ocurren cosas como estas y peores. Pues menos mal que de momento y hasta que venga me va hacer un plato provisional y como es lógico, a esperar otras 4 semanas, a que llegue otro plato de ducha.


Pero las desgracias nunca vienen solas, resulta que cuando han venido esta tarde, el que hace de jefe, que por lo visto es “un manitas”, se ha puesto a cambiar el grifo de la cocina y al cambiar los excéntricos resulta que me ha reventado el manguito al cual van atornillados. Como pueden pensarse, hay que reventar las losetas del alicatado, como es lógico, empiezan con una loseta y poco a poco rompen dos y las otras un poco descantilladas pero las dejamos, por que si no las vamos ha arrancar todas. Y esto solo para empezar. Así que ya me dirán: cuando acabemos el plato de ducha, los desastres que tendremos que afrontar. Y como consecuencia le voy diciendo a mi esposa, te das cuenta: por eso no quería yo hacer obras. Y ella que esta nerviosa a mas no poder, me dice cálmate, no pasa nada y yo la verdad: no se si estoy calmado, si estoy nervioso o como estoy. Y a todo esto, mi suegra, que no puede soportar los muebles fuera de sitio y a la que nos descuidamos un momento, los lleva otra vez al sitio que los ha visto siempre. Y si le dices algo te contesta si es que aquel no es su sitio. O bien te va preguntando: que quienes son esos hombres que están en el baño. ASÍ QUE NO NOS PONGAMOS NERVIOSOS, YA QUE TODO FUNCIONA. Y AHORA CON MI SALUD TAN PRECARIA, NADA MAS FALTARÍA QUE ME DE UN “TELELE” Y VEREMOS COMO SALIMOS. SEGÚN MI ESPOSA, “COMO ESTA MUY CALMADA” ME DICE QUE: CUANDO LLEGUEMOS AL PUENTE YA LO PASAREMOS.

COM UN RECORD EM VE…

Com un record em ve:
fèiem via
d’escuma i mar
envers la llar dels temps antics.

ELIAS MAS